"Graves amenazas": diputados de izquierdas secuestran el Consejo Constitucional por la ley de narcotráfico

Los diputados de izquierda anunciaron el miércoles 7 de mayo que habían remitido al Consejo Constitucional numerosos artículos de la ley sobre el narcotráfico aprobada por el Parlamento, que consideran "representan graves amenazas a nuestro Estado de derecho".
Apoyado por electos rebeldes, ecologistas y comunistas, un primer llamamiento ataca en particular la muy discutida creación de lugares de alta seguridad en las cárceles para los traficantes más peligrosos .
Los diputados piden al Consejo que censure el artículo que contiene esta medida, que se ha vuelto emblemática y fue introducida en comisión en la Asamblea: los traficantes más peligrosos serían destinados a estos nuevos distritos, por decisión del Ministro de Justicia, bajo ciertas condiciones.
Este régimen prevé, entre otras cosas, la realización de registros corporales completos supervisados en caso de contacto sin la supervisión de un agente. Pero los demandantes ven en ello una "cláusula legislativa", sin conexión suficiente con el texto inicial, que, según su recurso, no contenía "ninguna disposición relativa al régimen penitenciario".
En cuanto al fondo, critican su redacción por ser demasiado vaga, en particular en su ambición de "impedir la persecución o el establecimiento de vínculos" con redes criminales.
"El texto no precisa la naturaleza ni la intensidad de los 'vínculos' que deben impedirse", critican, considerando que también contraviene la "dignidad humana" al prever una "sistematización de registros corporales integrales sin suficiente supervisión".
Otro artículo apuntó: la experimentación con el uso de inteligencia algorítmica contra el narcotráfico, una técnica ya autorizada contra el terrorismo y la injerencia extranjera, pero que los diputados consideran "desproporcionadamente invasiva de la privacidad".
Los diputados también pidieron la censura de otras medidas, como la activación remota de dispositivos electrónicos para escuchas telefónicas o la prohibición durante un mes de presentarse en lugares vinculados con actividades de trata.
También se critica la creación de un informe separado ("archivo seguro") para evitar revelar cierta información a los traficantes y sus abogados, ya que los diputados lo consideran contrario a los "derechos de la defensa" y a un "juicio justo".
Los rebeldes presentaron un segundo recurso, en el que se destaca en particular la creación de una fiscalía nacional antinarcóticos, una medida importante en el texto pero que, según ellos, podría "crear desigualdades de trato entre los inculpados", en contra de la Constitución.
También denuncian las condiciones del cierre administrativo de empresas sospechosas de lavado de dinero, una facultad conferida a los prefectos. Si bien lo consideran en sí mismo contrario a ciertos principios como la "libertad de empresa", también creen que "la ausencia de control judicial" "socava el principio de separación de poderes".
BFM TV